La dirección del país se jacta de decir que Cuba es una sociedad justa, humanitaria y democrática, nada más lejos de la realidad o esa es la realidad que piensan los que nos dirigen tan aislados del cubano proletario. Es que hay que mirarnos para saber que nos vamos por el camino correcto cuando en los últimos años han huido del país cerca de medio millón de personas de una población envejecida de apenas once millones, nada tan simple como que se han ido del país el 5% de la población en su mayoría jóvenes considerados el "relevo de la revolución cubana", sin contar que en Estados Unidos y el resto del mundo hay cerca de 3 millones de personas procedentes de Cuba (21.4% de la población) que han huido por problemas políticos y en busca de libertades.
Llevamos años estancados en esa cifra de 11 millones de personas según el último censo de población y vivienda con una población envejecida porque el ciudadano cubano tiene que pensarlo no una ni dos veces para tener un hijo sino que tiene que meditarlo cientos de veces porque la familia cubana no está en condiciones para tener hijos dada la necesidad existente en el país, por los problemas de vivienda, de economía, de salarios, de libertad. Y aun así nuestros dirigentes se cuestionan: ¿por qué las mujeres no quieren tener hijos? Porque es duro traer al mundo una criatura para sufrir necesidad y hasta considerarse tristemente como una carga para la familia cubana. Es una realidad que el ser humano piensa como vive, nuestros dirigentes no sufren problemas económicos y casas tienen varias en diversos lugares del país violando acápites de la constitución. Yo que soy un cubano más, igual que el ciudadano común del país, sufro en carne propia la necesidad que sufre el pueblo y me siento comprometido con el mismo puesto que nadie hace nada para mejorar la situación de la inmensa mayoría demostrando la ineficiencia de nuestro sistema económico-social y sus principales dirigentes.
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